sábado, 31 de octubre de 2009

La duda de Manuel Burga

Blatter con una sonrisa lo despedía sin mostrarle la puerta de salida, pues ya estaban en la calle. Isaac estaba muy entusiasmado con la idea. Lo soñó durante mucho tiempo, y se reía mucho cuando veía por la televisión a todos esos periodistas deportivos discutir acerca del balón que tal vez no había trapasado la línea del gol, pero podría haber ingresado… que entró , que no entró…Era la discusión eterna y que desde aquel lejano 1966 cuando Inglaterra campeonaba con un gol dudoso donde el balón había caído sobre la raya debajo del arco y que el arbitro había validado. Ahora Isaac había encontrado la forma de terminar de una vez por todas con esa discusión. Solicitó una reunión de urgencia con Blatter contándole sobre su hallazgo sin revelar aun su idea. Por fin seria famoso. No aceptó los boletos de avión Lima-Zurich que le daba la FIFA, pues sabía que por esta idea cobraría muy bien. Además llamarse Isaac lo hacia sentir muy confiado y lo consideraba premonitorio pues él también se sentía un profeta.

Antes de hacer su exposición en la sala del directorio de la FIFA, advirtió que sería muy breve, porque la solución era muy simple y no iba a ser necesario extenderse tanto: “ ésto es así: cuando el balón pega en el travesaño y baja y luego cae sobre la línea o detrás de ella, muchas veces sale hacia afuera, dependiendo del efecto que lleve el balón. Pues bien, la solución es bien sencilla y no requerirá casi ninguna inversión. Solo hay que inclinar levemente el piso en ese sector unos 5 grados hacia abajo detrás de la línea del arco. Entonces la pelota al pegar detrás de la línea, automáticamente se irá hacia dentro. No saldrá hacia afuera, que es lo que nos ha confundido durante tantos años . Ahora los resultados serán más justos… muchas gracias”. Lejos de escuchar estruendosos aplausos, Isaac solo miraba a los altos dirigentes que se miraban entre sí. Manuel Burga, un dirigente peruano pidió la palabra para hacer una pregunta: “ dime..¿ Qué pasa cuando la pelota no llega a caer al piso, porque justo alguien la rechaza hacia fuera?...¿ como sabemos si realmente entró?

Isaac en ese momento se quedó helado, sin reacción. No tenia una respuesta. Intentó improvisar algo: “ En ese caso habría que confiar en la palabra del arquero” …Pero lo cierto es que había un agujero en su propuesta.

Blatter se paró y le pidió que lo acompañe, mientras le conversaba: ”Mira Isaac, la verdad es que nosotros estamos desarrollando un sistema, mediante tecnología, que va a determinar con mucha precisión cuando la pelota en realidad ha entrado, y hay mucho dinero en juego. Lo lamento pero tu idea ahora ya no es rentable. Más bien para que no te vayas sin nada, acá tienes mi autógrafo. Y ahora discúlpame, que tengo que regresar con el directorio. Tenemos que discutir sobre un nuevo campeonato que vamos a proponer en Europa, porque me parece que aun no son suficientes y un nuevo diseño de balón, que hará llorar a los arqueros… jajajaja...¡ Adiós!. ¡Ah y no olvides pasar por nuestra tienda de souvenirs, a ver si nos compras alguna cosita!... ”

Isaac tendría que haber sido menos arrogante y revisar mejor su propuesta. Tendria que saber además que el profeta no se llamaba Isaac sino Isaias.